La reforma legal de la casación civil es una pretensión que, con mayor o menor intensidad, ha sido constante en los últimos veinte años, siendo incluso coetánea a la misma aprobación y publicación de la Ley 1/2000, de 7 de enero, de Enjuiciamiento Civil. En contestación a ese eterno debate, el Anteproyecto de ley de medidas de eficiencia procesal del Ministerio de Justicia plantea una revisión profunda de la técnica casacional. La repercusión de la reforma y la capital importancia del recurso de casación convierten en obligado el diálogo sobre un instituto jurídico que condiciona la misma noción de «Derecho».