Barcelona, España
En este artículo se sostiene que ha habido una tendencia a ver Los cachorros como una especie de apéndice del cuerpo central de la obra de Mario Vargas Llosa, cuando, en realidad, al margen de sus afinidades, muestra registros originales e irrepetibles. La proliferación de citas en este artículo —explica J. A. Masoliver— trata de compensar las interpretaciones abstractas, cuando no descabelladas, que se han hecho de la novela. Se destacan aquí la presencia castradora de la cultura norteamericana y de la educación religiosa, el infantilismo y los símbolos fálicos como parte del enmascaramiento y de la afirmación de la virilidad, la voluntad del grupo de integrar a Cuéllar, la barrera entre el mundo masculino y femenino y la presencia de Teresita Arrarte, que representa el desenmascaramiento definitivo y, con él, la destrucción del protagonista.