David Montoya Medina
La contratación para obra o servicio determinado vinculada a los procesos de subcontratación de actividades productivas, por su incidencia negativa en la estabilidad en el empleo de los trabajadores, ha venido siendo criticada por la mayoría de la doctrina científica. Sin embargo, pese a sus llamativos efectos precarizadores, dicha praxis contractual ha venido siendo tolerada por la jurisprudencia durante mucho tiempo. Un reciente pronunciamiento de la doctrina unificadora ha optado por abandonar su clásica línea interpretativa, dando un paso de gigante en este ámbito. Pese al cambio de rumbo de la nueva doctrina jurisprudencial, la misma cuenta con interesantes precedentes que ya permitían vaticinar un cambio de rumbo en este ámbito.
The hiring for a specific work or service linked to the processes of subcontracting of productive activities, due to its negative impact on workers´job stability, has been criticized by most of scholars. However, in spite of its striking precarious effects, this contractual practice has been tolerated by Supreme Court rulings for a long time. A recent judicial resolution has chosen to abandon its classic position, taking a giant step forward in this area. Despite the U-turn of the Supreme Court criteria, it has interesting precedents that already allowed to predict a change on this matter.