Miguel Campos Robles
El Tratado de Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio, firmado por los Estados Unidos y la Unión Soviética en 1987, contribuyó al final de la Guerra Fría y al mantenimiento de la paz y la estabilidad en Europa mientras ha estado en vigor. La experiencia obtenida durante su negociación y aplicación contribuyó decisivamente al éxito de los tratados de desarme y control de armamentos que le siguieron. Dos son las causas de su desaparición el pasado 2 de agosto de 2019, en un primer plano, aparecen las mutuas acusaciones de violación del mismo entre los Estados Unidos y Rusia, y en un segundo plano, pero quizás la causa fundamental, la modificación del escenario geopolítico internacional con la aparición de terceros actores no sujetos al Tratado, lo que ha llevado a las partes a considerar su falta de utilidad política y militar ante el nuevo orden mundial que se está creando.