El que fuera líder del Partido Laborista británico, Jeremy Corbyn, acaba de anunciar la puesta en marcha del Proyecto para la Paz y la Justicia, una forma de seguir luchando contra las desigualdades y el imperialismo. La iniciativa sacará partido, sin duda, de la deriva derechista de su sucesor al frente de los laboristas, Keir Starmer, que fue elegido para reconciliar a un partido dividido y que, sin embargo, parece más ocupado en silenciar a su ala izquierda.