Este artículo intenta replantear el debate sobre el papel político de las clases prestando atencion a los nuevos "cleavages? que emergen con la expansión del estado de bienestar. La evolución electoral de España desde mediados de los años ochenta a mediados de los noventa puede entenderse, al menos en parte, como un proceso de intercambio de apoyo electoral por politicas de bienestar, siempre que dejemos claras las condiciones del mismo. Se intenta así superar tanto el reduccionismo metodológico característico del análisis de clase convencional, según el cual la oferta política esta determinada por la demanda (es decir, las "paleo-clases"), como el reduccionismo simétrico tendente a convertir las élites políticas en una suerte de "deux ex machina" plenamente capaz de subsumir la demanda política en su propia racionalidad.