Los datos son un activo estratégico para las Administraciones Públicas. Una correcta gobernanza de los datos con los objetivos de que generen conocimiento por una parte y a su vez sean únicos, abiertos, accesibles, georreferenciados, enlazados, interoperables y reutilizables por otra, nos obliga a diseñar un modelo, una estrategia de una forma holística y debe basarse en el Data Science y en profesionales cualificados.