Alberto Ortiz de Zárate
Una gestión pública que merezca este nombre siempre se ha fundamentado en datos. El siglo XXI aporta la posibilidad de emplear más datos, más frecuentes y más variados, junto con sofisticados sistemas de análisis del presente y del futuro. Pero hay que gobernar los datos para poder gobernar con datos. En este artículo se analiza una parte de esta problemática y se pone en relación con una rendición de cuentas completa y efectiva.