El parón de la actividad laboral por la pandemia derivada del COVID-19 ha llevado a miles de empresas a presentar el denominado Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), la mayoría por fuerza mayor. Dichos expedientes permiten a las empresas una suspensión de contrato o una reducción de la jornada (y sueldo) de sus trabajadores para evitar el cierre ante la pérdida de actividad causada por la pandemia.