El objeto de estudio es la descripción de las actuaciones en formación continua que actualmente operan en el sector de la intermediación financiera, y más concretamente en el colectivo de mujeres de entre 45 y 55 años, empleadas en el sector bancario durante más de veinte años dentro de categorías poco cualificadas. Con la intención de poner de manifiesto que los determinantes de quién recibe formación en la empresa están muy relacionados con los costes y rendimiento de la inversión en capital humano, dos grandes cuestiones vertebran el núcleo fundamental del artículo: en primer lugar, ¿qué características definen y diferencian la generación de mujeres a la que nos referimos? Una vez trazadas las características, la cuestión es: ¿se benefician estas mujeres de los programas de formación continua de las empresas? Y si no es así, ¿por qué?