Mirentxu Marín Malo
En los últimos años, gracias a las nuevas tecnologías, el poder de control del empresario ha aumentado mediante el uso de estas con el objetivo de verificar la prestación de servicio por parte del trabajador. El control de la jornada, la video vigilancia en el tiempo de trabajo o los programas que permiten acceder al ordenador del trabajador son algunos ejemplos de esta vigilancia exhaustiva de la prestación del servicio. Sin embargo, estas medidas no están exentas de polémica. La jurisprudencia se ha visto obligada a determinar los límites a su uso con el objetivo de proteger los derechos de los trabajadores. El presente trabajo pretende analizar los límites que la jurisprudencia ha puesto a la geolocalización del trabajador durante la jornada laboral.
Over the last years, thanks to new technologies, the control power of the employer has increased through the use of these technologies with the purpose of controlling the provision of service by the worker. Control of the working day, the video surveillance during working time or programs that allow access to the worker’s computer are some examples of this exhaustive monitoring of the provision of the service. However, these measures are not without controversy. Case law has been forced to determine the limits to its use in order to protect workers’ rights. This paper aims to analyze the limits that jurisprudence has established to the geolocation of the worker during the working day.