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Manuel Uribe Castañeda, Agustín Caso Raphael
Resulta interesante para la investigación de los problemas migratorios señalar las diferencias específicas de dichos procesos en diversas estructuras económicas. En términos generales se puede definir a la migración como un movimiento voluntario de población a través de un espacio sociocultural. La migración significa un movimiento a lo largo de un vector geográfico que, como regla, incluye también un movimiento a lo largo de un vector económico, de un conjunto de oportunidades de empleo a otras. Otras condiciones que afectan decisiones de desplazamiento pueden ser conceptualizadas como elementos que generan también un vector social. Por último, existen condiciones políticas que determinan movimientos migratorios. En sociedades subdesarrolladas los factores que condicionan la migración son aquellos que permiten rebasar los niveles de subsistencia y que resuelven el problema de desempleo.Las consideraciones anteriores son de particular importancia para el análisis de los procesos migratorios en el caso de México. Es difícil que los procesos migratorios internos que se observan, contribuyan de algún modo al desarrollo económico y social del país, al permitir al hombre "superar la tiranía del espacio", lo cual es fácil demostrar si se observan las elevadas tasas de desempleo y subempleo en las áreas de atracción de población.
