Fernando Estirado
El fenómeno natural de la erosión, al perder en muchas zonas su dinámico equilibrio, se convierte en un problema medio ambiental de primer orden por su desfavorable incidencia sobre el medio natural, en especial sobre los recursos suelo y agua.
Sus efectos más importantes en Europa, considerando la erosión en su más amplio sentido, se manifiestan en tres ámbitos diferenciados. Los tres distintos escenarios son estudiados para poner de manifiesto tanto las medidas correctoras necesarias en cada caso como las dificultades y limitaciones para la aplicación de esas medidas.
La situación actual, y especialmente la futura previsible, justifican una Política Europea de Control de la erosión basada en unos principios básicos entre los que destaca la planificación a largo plazo. En el momento presente se dan cita algunas circunstancias que hacen posible y oportuna, además de necesaria, esa Política.