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Albert Massot Martí
Hacia una nueva política rural integrada en una Europa abierta.
La PAC, con sus principios de la preferencia comunitaria y de la solidaridad financiera (mediante el FEOGA-Garantía), considera a la agricultura como una actividad específica, que no puede someterse a las leyes normales del mercado, y que ha de ser apoyada por el dinero público (comunitario). Sin embargo, a finales de este siglo XX, la agricultura, al igual que el resto de actividades económicas, ha entrado en la dinámica de la mundialización. Este escenario desemboca a la larga en la commoditization de la producción agraria, a la desaparición de los mecanismos tradicionales de apoyo, y a la disolución del principio de preferencia comunitaria, de la mano de las ampliaciones hacia el Este, las negociaciones multilaterales (OMC), y el desarrollo de sucesivos acuerdos comerciales y de libre cambio. En este contexto, existe la alternativa de una nueva PAU para una Europa abierta, que compatibiliza la apertura a la competencia internacional con la integración europea, regionaliza el proceso de globalización en curso, y, en fin, hace converger la preferencia comunitaria y la preferencia comercial.
