Marc-Antoine Pérouse de Montclos
Segunda potencia económica de África, Nigeria ha de enfrentarse con los ataques de la secta Boko Haram. En menos de diez años, han muerto más de cuarenta mil personas; la mitad de ellas han caído bajo las balas de las fuerzas de seguridad encargadas de combatir a los yihadistas. En un país mimado por los Estados occidentales, la seguridad se ha convertido en un mercado, tan ineficiente como corruptor.