Valladolid, España
En el año 2014, la Ley de Regeneración Urbana de Castilla y León estableció un calendario para desclasificar el suelo urbanizable no desarrollado, con tres hitos temporales:
- A los dos años (octubre de 2016) pasaron automáticamente a ser suelo rústico 114.926.195 m2 de terrenos clasificados como suelo urbanizable antes de la aprobación de la Ley de Urbanismo de Castilla y León (1999) que no tenían aprobada su ordenación detallada.
- A los cuatro años (octubre de 2018) ha sucedido lo mismo con 283.158.058 m2 de suelo urbanizable no delimitado clasificado conforme a la Ley de Urbanismo de Castilla y León.
- Y a los ocho años (octubre de 2022) sucederá lo mismo con el suelo urbanizable delimitado que para entonces aún no tenga ordenación detallada.
Este artículo resume los avatares y detalles de este proceso de desclasificación, y también su recepción por las administraciones públicas, los propietarios afectados y la sociedad en general. Pero mi objetivo principal es ofrecer una visión a posteriori que permita reflexionar sobre el proceso de clasificación acelerada de suelo urbanizable que se vivió en toda España en los años anteriores a la reciente crisis económica, incluso en territorios alejados de las zonas de mayor presión urbanizadora.