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El pasado 16 de julio de 2019 entró en vigor una de las Directivas más importantes aprobadas en Europa en los últimos años, la Directiva (UE) 2019/1023, de 20 de junio de 2019, sobre marcos de reestructuración temprana, exoneración de deudas e inhabilitaciones y sobre medidas para aumentar la eficiencia de los procedimientos de reestructuración, insolvencia y exoneración de deudas. El presente trabajo analiza las novedades de dicha directiva, cuyo objetivo es muy ambicioso, pues persigue reestructurar empresas viables en la proximidad de la insolvencia (valor en funcionamiento superior al valor de liquidación), maximizándose en un modo equilibrado el valor de la empresa para los acreedores, los socios como «propietarios» de la compañía y la economía en su conjunto, preservando puestos de trabajo y previniendo de algún modo con ello el problema para la banca de los «préstamos improductivos». Al mismo tiempo, se deja clara la necesidad de acelerar y realizar lo más rápido posible la liquidación de aquellas compañías que no sean económicamente viables, debiendo los estados miembros introducir en sus Derechos Concursales medidas para mejorar la eficiencia de éstos.
