El Tribunal de Cuentas es el supremo fiscalizador de la actividad eco-nómica-financiera del sector público, así como la institución responsa-ble de la jurisdicción contable. Por su parte, el Servicio Nacional de Coordinación Antifraude es el Anti-Fraud Coordination Service (AFCOS) encargado de dirigir y concertar a nivel nacional las acciones encami-nadas a proteger los intereses financieros de la Unión Europea contra el fraude. La colaboración entre ambas organizaciones puede producir sinergias y evitar duplicidades aprovechando la especialidad funcional y la capa-citación de su personal. Por una parte, del Tribunal de Cuentas puede facilitar información sobre las sospechas de fraude detectadas en los informes de fiscalización y coordinar los casos de enjuiciamiento con-table con las investigaciones abiertas por la Oficina Europea de Lucha Antifraude. Por otra, el Servicio Nacional de Coordinación Antifraude puede facilitar información sobre los casos de fraude detectados en los procesos de gestión de los fondos comunitarios, para colaborar en la elaboración de los programas de fiscalización y la apertura de procedi-mientos de responsabilidad contable. Finalmente, en materia de for-mación, ambas organizaciones pueden desarrollar una labor conjunta para intercambiar experiencias y técnicas de trabajo.
The Court of Auditors is the supreme inspector of the economic-financial activity of the public sector, as well as the institution responsible for accounting jurisdic-tion. The National Anti-Fraud Coordination Service is the Anti-Fraud Coordina-tion Service (AFCOS) responsible for coordinating actions at national level to protect the European Union’s financial interests against fraud.Collaboration between the two organizations can produce synergies and avoid duplication by taking advantage of the functional expertise and training of their staff. On the part of the Court of Auditors, it can provide information on suspect-ed fraud detected in the audit reports and coordinate cases of accounting prosecu-tion with investigations opened by the European Anti-Fraud Office. On the side of the National Anti-Fraud Coordination Service, it can provide information on cases of fraud detected in the management of Community funds to facilitate the preparation of audit programs and the opening of accounting prosecution proce-dures. Finally, in terms of training, both organizations can work together to ex-change experiences and work techniques