Socorro, Portugal
En tiempos de crisis económica, la distribución y el impacto de sus efectos varían mucho entre sectores sociales, debido a sus diferentes niveles de exposición y disponibilidad de recursos. Este artículo propone un análisis de las principales políticas públicas y programas de lucha contra la pobreza entre las personas mayores en Portugal, en las últimas dos décadas. Se analiza críticamente la situación social y política actual a partir de tres perspectivas: pobreza, género y patrocinio público-privado. Las recientes medidas de restricción han comprometido la lucha contra la pobreza de personas mayores en los últimos 15 años. Aunque este tipo de pobreza es considerada actualmente una prioridad política, no se están desarrollando políticas adecuadas. Las intervenciones están dirigidas a situaciones extremas de pobreza y de dependencia. Las medidas preventivas son excluidas de los planes. El Estado delega cada vez más las responsabilidades de asistencia social en el sector privado no lucrativo. La perspectiva de género es todavía un concepto retórico.
In times of economic crisis, the distribution and impact of its effects vary greatly among social groups, due to the different level of exposure and availability of resources. This article conducts a policy analysis of the most important public policies and programmes fighting elderly poverty in Portugal, in the last two decades.It critically analyses the actual social and political situation, from three main perspectives: poverty approach; gender mainstream and public-private partnerships. The latest restriction measures have been jeopardizing the fight against poverty conducted in the last 15 years. Although poverty among the elderly is presently considered a political priority, no comprehensive policies are being developed. The policy interventions are directed towards extreme situations of poverty and dependency. Preventive measures are excluded from policies planning. The state is increasingly delegating to the social sector the social care responsibilities. Gender mainstream is still a rhetoric concept.