Hélène Bourdeloie
Numerosos son los trabajos que se apoyan sobre la sociología de la dominación para estudiar las desigualdades de los usos de las tecnologías numéricas, ya que éstas son a menudo, la manifestación de profundas divisiones sociales. Las teorías de la dominación de Pierre Bourdieu, tienen efectivamente el interés de mostrar que el mundo social esta estructurado por estratos según un principio de legitimidad. Aquí, el sistema de la jerarquía social se mantiene porque los dominados no lo contestan. Si la era numérica confunde las jerarquías tradicionales a causa de su carácter estático, ésta sociología presenta ciertos limites. Es por ello que proponemos de privilegiar un enfoque interseccional que permite tomar en cuenta, las relaciones de poder entre los individuos, considerando también las formas de resistencia que los animan. Una encuesta de campo realizada en Francia a personas mayores de 60 años, sirve de base al análisis. La encuesta muestra, que si las relaciones diferenciadas entre los adultos mayores a las Tecnologías digitales están relacionadas considerablemente a su pertenencia a la edad, al sexo y a la clase, la combinación de ésas categorías de análisis permiten sin embargo, configuraciones especificas que dan lugar a espacios de negociación con las normas dominantes.
A good deal of research uses the sociology of domination to study inequalities in digital technology usage as these often stem from deep-cut social divides. Bourdieu’s theory of domination has been widely employed to demonstrate that the social world is stratified according to a principle of legitimacy: the social hierarchy holds good because those who are dominated do not challenge this order. Yet, in the digital era – which is a destabilising factor for traditional hierarchies – this type of theory comes up against certain limits due to its static premises. For this reason, our study adopted an intersectional approach, as this is more able to take into account the power relations between individuals and, more specifically, the forms of resistance that drive individuals. A field study conducted with French people over the age of 60 served as the basis for this theoretical analysis. The study shows that the seniors’ differentiated relationships with ICTs correlate strongly with their age group, gender and class. When these analytical categories are combined, patterns emerge – patterns that are not only specific but which also reflect a process of negotiation with the dominant norms.