Daniel Chasquetti
La historia constitucional uruguaya destaca en el concierto latinoamericano por su inclinación a la experimentación institucional. Uruguay tardó noventa años en reformar su primera Constitución, pero en las siguientes cinco décadas aprobó cuatro reformas que afectaron los derechos políticos y sociales, el diseño del Estado, el equilibrio entre poderes y el sistema electoral. Este artículo analiza el proceso de reformas desarrollado entre 1918 y 1967 poniendo particular atención en el diseño de tres modelos distintos de organización del Poder Ejecutivo: el bicéfalo, el colegiado y el dúplex. Esos diseños buscaron evitar la concentración del poder en la figura del presidente y garantizar mecanismos para la coparticipación de los partidos en la conducción del Estado. El artículo propone interpretar el proceso de creación de modelos institucionales como sofisticados experimentos guiados por el ensayo y el error, y orientados a alcanzar un punto de equilibrio satisfactorio para los distintos actores políticos.
The Uruguayan constitutional history stands out in the Latin American concert for its incli nation to institutional experimentation. Although it took Uruguay ninety years to reform its first Constitution, within the following five decades the political system approved four institutional reforms that affected the political and social rights, the design of the State, the balance between the State powers and the electoral system. This article analyzes the process of reforms developed between 1918 and 1967, considering particularly the design of three different models of organization of the Executive Power: the two-headed model, the collegiate model and the duplex model. These designs sought to avoid the concentration of power in the person of the president and to guarantee some mechanisms for partisan participation in the autonomous bodies of the State. The article proposes to interpret the process of creating institutional models as sophisticated experiments guided by trial and error, and aimed at reaching a satisfactory point of equilibrium for the different political actors.