María Aránzazu Robles Santana
El presente artículo aborda la migración de las mujeres indígenas Mam – originarias del Departamento de San Marcos, Guatemala-, a la región del Soconusco, México–, desde un enfoque multidimensional. Existen variadas negociaciones en este espacio transfronterizo que no se limitan a la misma frontera física, y que repercuten en sus vidas y en su proceder. Su, a priori, condición de vulnerabilidad, dada la triple identidad que portan, esto es, ser mujeres, migrantes e indígenas, se apoya en que son un colectivo vulnerado históricamente y mantenido en el tiempo. Esta realidad se entrecruza con las resoluciones que continuamente toman, afianzando así su agencia y estrategias de vida. En contraposición a esta toma de decisiones, está su situación como trabajadoras inmigrantes;
aspecto que les sitúa en un espacio de indefensión y explotación. A partir de las conversaciones en profundidad mantenidas con mujeres Mames trabajadoras en las fincas de café del Soconusco, trabajadoras del hogar y trabajadoras informales en las calles de la ciudad fronteriza de Tapachula, así como con actores y actrices de la sociedad civil e institucional de la misma ciudad fronteriza, se irán dilucidando estas cuestiones. El objeto, en última instancia, es el de explorar los impactos que la vulnerabilidad migratoria supone en sus vidas, así como observar la carga que adquieren las dimensiones de género y etnicidad en este espacio de movilidad transfronteriza.
This article discusses the migration of Mam indigenous women -from San Marcos Department, Guatemala-, to the region of El Soconusco, Mexico, from a multidimensional approach. Various negotiations take place in this border space that are not limited to the actual physical border; these issues affect their lives and their actions. Their a priori condition of vulnerability, given their triple identity bearing as women, migrants, and indigenous people, is supported by their belonging to a population discriminated against historically and for a sustained period of time. This reality intertwines with the resolutions they must continually make, strengthening their agency and livelihood strategies. In contrast to their decision-making, is their status as migrant workers, an aspect that places them in a space of helplessness and exploitation. From in-depth discussions held with Mames women workers on the coffee plantations of Soconusco, domestic workers and informal workers in the streets of Tapachula, as well as actors and actresses of civil and institutional society in the same border town, we could further explain these issues. The aim, ultimately, is to explore the impact that immigration vulnerability poses in their lives, and observe the load acquired by the dimensions of gender and ethnicity in this area of cross-border mobility