Fréderic Courleux, Aurélie Trouvé
Los proyectos de la Comisión Europea en materia agrícola para los próximos siete años reflejan el colapso político de la Europa comunitaria. El reparto de las subvenciones entre agricultores o las normas medioambientales se habrían dejado a la buena voluntad de los Estados miembros, dibujando una política a la carta, lejos de los imperativos sociales y ecológicos contemporáneos.