Alexander Mosquera, Dobrila Djukich de Nery
El envite y el azar no hacen referencia solo a loterías, carreras de caballos y bingos, sino a toda situación que involucre el apostar y el factor suerte: dos aspectos apreciables en el discurso lúdico amoroso-sexual, cuyo análisis sociosemiótico se aplicó a los graffiti colectados en salas sanitarias de hombres y mujeres de la Universidad del Zulia (Maracaibo, Venezuela). Los objetivos son: 1) Determinar la presencia del envite y el azar en dichos graffiti; y 2) elaborar el modelo comunicacional que subyace en ese “hacer”. Este estudio se enfoca desde la perspectiva de la semiótica espacial (Greimas y Courtés, 1979; Augé, 1996; Landowski, 1997). Se obtuvieron nueve áreas lúdico-temáticas, con el predominio del juego sexual (32%), lo que permitió construir el modelo de comunicación lúdica-sexual, en el que se establece un diálogo mediato entre un jugador oferente y un jugador al azar demandante, quienes apuestan al sexo. Además, el hombre dirige su mensaje-apuesta a jugadores del mismo sexo y las mujeres han roto las barreras de un “hacer” que se consideraba exclusivo de los hombres.
Raise and chance is not just lotteries, horse races and bingo, but it is whichever situation that involves a gamble and the luck factor: both aspects are presented in the ludic love-sexual discourse, from graffiti collected in male and female restrooms of University of Zulia (Maracaibo, Venezuela). The objectives are: 1) Determining the presence of raise and chance in these graffiti; and 2) building the communication model that underlies this “doing”. This research is focused under the spatial semiotics perspective (Greimas et Courtés, 1979; Augé, 1996; Landowski, 1997). Nine ludic-thematic areas, of which the sexual gambling (32%) predominated, were gotten. This allowed building the ludic-sexual communication model, where a mediate dialog between an offerer gambler and a demander chance gambler, who gamble to sex, is established. Furthermore, man addresses his message-gamble to the same sex gamblers and women have broken the barriers of a “doing” that it was considered as something exclusive of men.