El Congreso y el Ejecutivo se sentirán satisfechos porque ¿ahora sí Colombia está a la vanguardia en materia de legislación electrónica¿, cuando solamente habrán tipificado una que otra conducta, seguramente con una redacción que confundirá términos técnicos. Creemos que no solamente una percepción de esta naturaleza es errónea sino somnífera, causa de un peor atraso legislativo en el largo plazo.