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Pia Lappalainen
entornos industriales de hoy en día y la grave situación económica están presionando a las organizaciones hacia los ecosistemas de innovación y otros nuevos tipos de investigación o de negocios alianzas.
Los ecosistemas de innovación son arreglos col¬laborative emergentes que se benefician de una mezcla de diferentes organizaciones, cada una de enriquecer la empresa conjunta con sus fortalezas únicas, al tiempo que ofrece beneficios que los socios no tendrían acceso a solas. En su conjunto, los ecosistemas de innovación se materializan los principios y objetivos de la triple hélice, la integración de los conocimientos de la investigación, la educación y la industria, y promover efectivamente la creación de nuevos conocimientos, la difusión del conocimiento y la innovación. Este modo de funcionamiento emergente plantea requisitos para la diversidad del equipo, la colaboración, el pensamiento empresarial y la innovación, desafiando a los educadores a actualizar sus ofertas de forma que cumplan los requisitos industriales de la vida real. En este artículo se presenta un estudio de caso de un esfuerzo pedagógico reciente, el curso de Comunicaciones Integrado Industrial como un esfuerzo para integrar a la vida laboral cualificación en los estudios de grado. El objetivo final es educar a los graduados en ingeniería que están equipados para fomentar este tipo de componentes críticos de los ecosistemas innovadores como la diversidad, la colaboración, la seguridad y la capacidad de organización socio-emotiva.
Today’s industrial environments and the grave economic situation are pushing organizations towards innovation ecosystems and other novel types of research or business alliances. Innovation ecosystems are emergent col¬laborative arrangements that benefit from a mix of different organizations, each en¬riching the joint venture with their unique strengths, while offering gains that the partners would not have access to alone. As a whole, innovation ecosystems materialize the principles and objec¬tives of the triple helix, integrating expertise from research, education and industry, and effectively promoting new knowledge creation, knowledge dissemination and innovation. This emerging operating mode poses requirements for team diversity, collaboration, business thinking and innovativeness, challenging educators to update their offerings in ways that meet real-life industrial requirements. This article presents a case study of a recent pedagogic endeavour, the integrated Industrial Communications course, as an effort to integrate working life skilling into degree studies . The ultimate aim is to educate engineering graduates that are equipped to foster such critical components of innovative ecosystems as diversity, collaboration, organizational safety and socio-emotive capacity.
