Reconocer la precarización del trabajo en el ejercicio de la gestión organizacional contemporánea requiere un examen crítico de las formas en que se puede estar re-expresando la subordinación, sobre todo la del trabajador. Se propone como objetivo central, aportar al entendimiento de cómo y desde dónde ciertos contextos pueden arrastrar a los trabajadores y directivos al uso de estrategias racionales de supervivencia, convirtiéndolos en individuos dócilmente cooperantes al cumplimiento de metas, que en muchos casos no comparten pero que deben ser llevadas a cabo. Se reflexiona cómo en ciertos escenarios emergentes de la lógica capitalista maximalista se pueden crear mecanismos eficientes de “sometimiento” que se entremezclan en un aparente juego benevolente y objetivo. La trascendencia del capital expresada en ideales como la explotación racional del trabajo y los recursos, y la búsqueda desenfrenada del máximo rendimiento en una organización, puede desfigurar la dignificación del sujeto que intenta sobrevivir/permanecer en una organización. Las perspectivas de formación del administrador no pueden ser ajenas a estos cuestionamientos; la consolidación de un humanismo organizacional hace posible un encuentro permanente con la dignidad del trabajador.