No se puede dar una respuesta uniforme acerca de la utilidad del testamento simpliciter; somos conscientes que unidad sucesoria no equivale a unidad de título pero dicho esto, en todos los Estados cuyos Ordenamientos jurídicos (con independencia de los puntos de conexión empleados por las normas de conflicto) conciban la sucesión del heredero como un modo universal de adquirir, esto es, como una subrogación del causahabiente en la posición jurídica del difunto, en todos sus derechos y obligaciones que no se extinguen con su muerte, una planificación sucesoria unitaria facilita la tarea del operador jurídico y ahorra costes al ciudadano; la respuesta puede ser distinta en sistemas sucesorios fragmentarios de base territorial; en cualquier caso, el notario que sustancie la sucesión o cualquiera de sus elementos tendrá que acreditar la adecuación del acto a inscribir (partición, adjudicación parcial de herencia, entrega de legado etc.) a la legislación extranjera rectora de la sucesión. El reconocimiento por la testadora, por ejemplo, de que tiene hijos en cuyo favor nada dispone sólo será trascendente si la normativa que discipline la sucesión restringe la libertad de testar por tal circunstancia. Si el testamento es simpliciter, circunscrito a los bienes del disponente en territorio nacional, la cuestión que se debe dilucidar es la misma, se debe acreditar (probar) la validez del acto o negocio jurídico a inscribir, o, dicho de otra manera, cerciorarse de que concurren todos los que tienen que concurrir en la escritura de adjudicación de herencia para su validez de conformidad con la legislación extranjera a la que se sujeta la sucesión.
A uniform answer can not be given about the utility of the testament simpliciter; we are aware that the unit of succession does not amount to unity of title but that said, in all States whose legal systems (regardless of the points of connection used by the rules of conflict) conceive the succession of the heir as a universal way of to acquire, this is, as a subrogation of the successor in the legal position of the deceased, in all his rights and obligations that are not extinguished with his death, a unitary planning of the succession facilitates the task of the legal operator and costs savings to the citizen; the answer may be different in territorially fragmented inheritance systems; in any case, the notary who deals with the succession or any of its elements will have to prove the adequacy of the act to be registered (partition, partial inheritance, delivery of legacy, etc.) to the foreign legislation governing the succession. The recognition by the testator, for example, that he has children in whose favor nothing has disposed, only be transcendent if the regulations that discipline the succession restrict the freedom to dispose by succession for such circumstance. If the testament is simpliciter, circumscribed to the assets of the testator in national territory, the question that must be elucidated is the same, must prove the validity of the legal act or legal relationship to be registered, or in other words, prove that all those that must to attend the writing of inheritance adjudication they concur for its validity in accordance with the foreign legislation to which the succession is subject.