Laura Rodríguez Cardozo
Después de décadas de discusiones y acuerdos internacionales, en 2015 la Organización de las Naciones Unidas adoptó la “Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible” con la finalidad de contribuir a la solución de los actuales problemas de la humanidad. Frente a la complejidad de los mismos, su cumplimiento no puede quedar exclusivamente en manos de los gobiernos, de ahí la importancia del papel a cumplir por parte de la sociedad civil. En ese contexto, el objetivo del presente trabajo es presentar un panorama general del desarrollo de las Organizaciones no Gubernamentales (ONG) en el país que permita analizar su coincidencia con los objetivos de la mencionada Agenda, por medio de análisis documental complementado con información directa proporcionada por actores clave.
El artículo incluye una referencia a los principales conceptos, la evolución del Desarrollo Sustentable, una revisión de enfoques teóricos y estudios sobre las ONG y su contribución al medio ambiente y una descripción general de la situación mexicana en torno del tema: marco legal, registros de ONG disponibles, su número y distribución.
Posteriormente se presentan los criterios utilizados para seleccionar el grupo de 21 casos que se analiza en el trabajo. Los anteriores se caracterizan mediante un conjunto de variables que incluyen sus actividades, su antigüedad y experiencia, su relación con el gobierno y la sociedad civil, así como el origen de sus recursos, para finalizar analizando la contribución de sus actividades a los 17 objetivos que conforman la Agenda 2030.
Se concluye que el número de ONG mexicanas ha tenido un rápido crecimiento concentrado en las especialmente vinculadas al Desarrollo Sostenible y en las regiones Sur y Centro del país, que éstas presentan una antigüedad considerable y una amplia diversidad de temas y regiones cubiertas, complementarias de las acciones gubernamentales. En síntesis, la coincidencia de sus actividades con el Desarrollo Sostenible es relevante en el contexto nacional y fundamental en algunas regiones del país con menor presencia de programas gubernamentales. Sin embargo, se llama la atención sobre los riesgos de trabajar exclusivamente en alguno o algunos de los tres ejes del desarrollo sustentable, provocando efectos indeseados en el resto.