El trabajo que ahora se presenta se puede analizar desde un doble mirador historiográfico: por un lado, desde la perspectiva de los estudios históricos sobre la cuestión electoral y por otro, desde la trayectoria del Partido Comunista Mexicano (KM) y de sus organismos integrantes. Respecto a los primeros, es notoria la explosión actual de estudios electorales que no encuentran, sin embargo, sustento sólido en alguna tradición arraigada de historia electoral del México revolucionario y posrevolucionario. La cuestión electoral ha sido vista por los historiadores con recelo en cuanto a su importancia, y como un asunto secundario en cuanto a su significación frente a problemas que se consideran de un calibre mayor, tales como la construcción del Estado, los movimientos sociales, el ejército y el presidencialismo dominante.