Escribir casi 40 años después sobre el papel de los editores de medios de comunicación en la transición política española no deja de ser un reconocimiento, incluso un homenaje, a quienes desempeñaron un impagable servicio a la sociedad. Porque ellos, junto con otros actores, hicieron posible que la dictadura diera paso a un sistema de libertades y a un régimen democrático.