Nicholas Mirzoeff
Desde la recuperación del proyecto de la visualidad como justificación estética de la dominación, el presente artículo de!ende el derecho a mirar como la capacidad de confrontar los mecanismos visuales sobre los que se ha venido asentando el ejercicio de poder en momentos históricos concretos. Para ello, se lleva a cabo un recorrido a partir de los distintos complejos de visualidad, desde las plantaciones esclavistas y sus dispositivos de vigilancia hasta la violencia militar-industrial de nuestros días ejercida a través de drones, con el fin de dibujar una intensificación de la visualidad y su evolución contemporánea hacia una forma necropolítica.