El Consejo y el Parlamento Europeo han alcanzado el 28 de abril de 2017 un acuerdo provisional respecto a una propuesta de Reglamento revisado sobre medidas para garantizar la seguridad del suministro de gas. El objetivo general del Reglamento es reducir al mínimo los efectos de una potencial interrupción del suministro de gas mediante la mejora de la cooperación entre los Estados miembros y contribuir con ello a un mejor funcionamiento del mercado interior de la energía. La propuesta traslada a medidas concretas la primera dimensión de la Unión de la Energía: «seguridad energética, solidaridad y confianza».