Julio Rodríguez López
El sistema bancario español sufrió intensidad las consecuencias de la crisis financiera de 2007-2008 y de la posterior recesión. Dicho sistema ha experimentado una reducción significativa de la presencia en la economía española y ha sido objeto de una notable concentración, proceso que aún no ha finalizado. Las entidades que integran el sistema están experimentando cambios significativos en sus modelos de actuación, ante la notable modificación del contexto en el que se desenvuelven.