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Elizabeth Abalo, Gonzalo Alonso
La plaza de San Clemente se encuentra a escasos metros de la Catedral de Santiago de Compostela, ciudad Patrimonio de la Humanidad. Su reurbanización se incluye dentro del plan de actuaciones en el espacio público, programado, de forma conjunta, por el Ayuntamiento de la ciudad. Trece intervenciones llevadas a cabo por otros tantos estudios de arquitectura, coordinados desde la Oficina del Casco Histórico, y asistidos por un amplio equipo de historiadores, arqueólogos, topógrafos, geólogos e ingenieros.
El programa parte del entendimiento del espacio público como un continuo en la ciudad, pero con sus particularidades. Así, se trabaja de forma independiente en cada ámbito, pero coordinadas todas las intervenciones, en tensión, agrupadas incluso en áreas colindantes que podrían haberse desarrollado por un solo proyectista.
Y es esta metodología de trabajo la que se plantea también en San Clemente. Una propuesta unitaria que se adapta a las particularidades de sus límites; permitiendo en unos casos que el vecino nos contamine, pero violentándolo nosotros en otras ocasiones.
Como consecuencia, la intervención transmite su propio carácter, y sin embargo, se integra sin solución de continuidad en el casco histórico compostelano.
