Bernard Cassen
Con frecuencia se ha comparado la construcción europea con un ciclista: si no avanza, se encuentra en equilibrio inestable y termina por caer al suelo. En efecto, los dirigentes de los Estados y de las instituciones de la Unión Europea (UE) deben brindar constantemente a los ciudadanos motivos para estar juntos. Ésta es incluso la principal actividad de la Comisión Europea que, sin parar, produce proyectos de actos legislativos bautizados como “avances”.