Juan Francisco Alvarado
Conforme el nivel de interacción de los actores globales ha avanzado en las últimas décadas, el papel de los medios de comunicación ha aumentado y su papel en la política nacional e internacional se ha hecho más notorio. El impacto que los medios despiertan en la sociedad es una clave para que los ciudadanos opinen y se apropien de los temas que son más cercanos. Este fenómeno ha llamado la atención de varios académicos dispuestos a analizar el rol de los medios como formadores de opinión, como actores políticos y como difusores o exportadores de cultura.1 Aquí se analiza un caso muy particular de influencia y participación de la prensa en la política exterior de los Estados y de manera muy precisa en el proceso de paz ecuatorianoperuano de 1998.