Enrique Timmermann
Mendoza fue la primera provincia argentina en contar con una compañía petrolera privada: la “Compañía mendocina de Petróleo” de Carlos Fader. Esta empresa dejó de funcionar a principios de la década de 1910, marcando un vacío en la producción hidrocarburífera de Mendoza hasta que en 1932 el gobierno provincial firmó con YPF un convenio para la extracción del mineral. Sin embargo, hubo varios intentos privados por retomar la producción petrolera, más aún por producir combustible a través de destilación del “oro negro”. Estas acciones, que hoy están saliendo a la luz, muestran que empresarios mendocinos, sin mucho capital, daban comienzo a una etapa petrolera de producción no convencional: el shale oil. A su vez el Estado, que por ley no podía explotar el petróleo, tomó iniciativas tanto legislativas como organizativas para atraer inversores tanto nacionales como internacionales.