Antecedentes: el estudio de las adicciones a sustancias psicoactivas ha sido un tema de interés en la agenda pública a lo largo de la historia dado su prevalencia e implicaciones en la salud mental y en el ámbito social y legal. La tesis central del estudio se concreta en que las creencias nucleares predisponen la dependencia al consumo de sustancias psicoactivas, hallándose variables intervinientes como la depresión y la ansiedad que complejizan la dependencia y el craving de los individuos. El objetivo de esta investigación fue establecer las creencias que mejor explican el consumo y dependencia de sustancias psicoactivas. Método: estudio de casos y controles, participaron 80 personas, 35 en el grupo casos intervenidos en Comunidad terapéutico, y 45 en el grupo control. Instrumentos: Escala de creencias acerca del abuso de sustancias (Wright, 1999), CES-D (Eadloff y Loche, 1986), SCL-90-R (Derogatis, 1996), MINI (Scheehan y Lecrubier, 1998). Resultados: El primer factor explica el 19,195% de la VE y los demás hasta un 8%. Estos factores se refieren a los siguientes categorías: Categoría 1: Creer que las sustancias psicoactivas son necesarias para vivir (5 ítems, VE=19,195), Categoría 2: Creer que las drogas me controlan (4 ítems, VE=12,663), Categoría 3: Creer que las sustancias psicoactivas aumentaran el poder social y físico (3 ítems, VE=11,555), Categoría 4: Creer que el consumo de sustancias psicoactivas tiene un origen fuera de control (3 ítems, VE= 10,649), Categoría 5: Creer que el consumo de sustancias psicoactivas no es problemático (3 ítems, VE=8,908), Categoría 6: Valoración negativa de sí mismo (2 ítems, VE=8,743). Conclusiones: las creencias influyen significativamente y de manera predictiva al consumo y la dependencia de sustancias psicoactivas. Más que la depresión y la ansiedad, las creencias tienen un mayor nivel de predicción para el consumo y dependencia de sustancias psicoactivas.