Las fórmulas clásicas de intervencionismo local, han sufrido un gran cambio con la aprobación de la Directiva de Servicios, en la que se configura el paso de un control a priori por parte de la administración, a un control ex post, con mecanismos como son la declaración responsable y comunicación previa, que han supuesto un importante cambio en las relaciones entre las entidades locales y sus administrados. En la comunidad autónoma gallega la adaptación normativa se produce con la Ley 9/2013.