El desarrollo de la Web 2.0 y la aparición de redes sociales han supuesto una revolución en el ámbito de la comunicación que ha cambiado los modelos tradicionales y ha dotado de nuevos roles a los emisores, que no se limitan a recibir información sino también a crearla y difundirla. La rápida aceptación de estas nuevas herramientas de comunicación y su uso generalizado ha obligado a los partidos políticos a incluirlas en sus estrategias de comunicación. Durante la campaña electoral de las Elecciones Generales de 2011 las redes sociales irrumpieron con mayor fuerza. Así, a través del análisis del perfil en Twitter de los candidatos y encuestas tanto a estos como a expertos en comunicación política y usuarios de las redes, se concluirá que quizás su falta de experiencia o el desconocimiento de sus posibilidades limitaron su utilización, valorándola como un medio más de comunicación y sin tener en cuenta sus peculiaridades. Si por un lado Twitter se ha convertido en la red preferida por la clase política, el uso que se hace de esta no termina de ser el más adecuado en comunicación política, ya que tanto usuarios como expertos reclaman más implicación, más información personal y un lenguaje más coloquial y cercano.
The development of Web 2.0 and the emergence of social networks have revolutionized the field of communication. It has changed the traditional models and has added new roles to issuers, which are not limited to receive information but also create and dissemination it. The rapid acceptance of these new communication tools and their widespread use has forced political parties to include in their communication strategies. During the election campaign of 2011 General Elections social networks broke with greater force. Thus, by analyzing the Twitter profile of candidates and conducting surveys both politicians and experts in political communication and network users will conclude that perhaps the lack of experience of the candidates or the ignorance of the possibilities that networks offer, limited their use. So they value it as another means of communication and regardless of its peculiarities. On one hand Twitter has become the preferred network by the political class. But the use made of this does not being the most appropriate in political communication, and users and experts call for more involvement, more personal information and a more colloquial language and close.