Este ensayo hace una reflexión sobre la disyuntiva que enfrenta la transición democrática mexicana entre el liberalismo político con enfoque de ciudadanía electoral o el neocorporatismo con mayor asociacionismo y “empoderamiento” de la sociedad civil. Desde la perspectiva de la relación gobierno-gobernados, revisa de manera crítica los conceptos de participación y cultura política e identifica dos tipos ideales de regímenes de intermediación de intereses: el corporativismo y el liberalismo político. El trabajo ilustra estos dos regímenes con las corporaciones de los pueblos de indios que existieron en la época colonial, con el régimen liberal del gobierno de Juárez en el siglo XIX y con el corporativismo sectorial del partido gobernante en el siglo XX. Se propone el neocorporatismo de Schmitter como la alternativa de México para avanzar en la transición democrática