Entre 2007 y 2016, el número de médicos generalistas en Francia ha disminuido un 8,7%. En la actualidad, más de tres millones de personas tienen dificultades para encontrar un médico de cabecera. Este problema, que surgió en primer lugar en las zonas rurales, afecta hoy en día a pequeñas localidades como Lamballe, un municipio bretón al que ha llegado este "vacío médico".