Claudia Marcela Arana Medina, Mónica Gómez Botero, David Molina
El presente artículo se propone dar a conocer los resultados de un proceso investigativo en el cual se vinculó el perfil de alguna de las funciones ejecutivas, espeicalmente as orbitofrontales y dorsolaterales, las cuales, según antecedentes de investigación —que se tendrán en cuenta—, aparecen alteradas en personas que tienen conductas relacionadas con el crimen, la delincuencia y la violación de las normas, por lo que cumplen con los criterios para el trastorno de personalidad antisocial. Se utilizaron pruebas neurocognitivas, tales como el test de Stroop, el Fas fonológico (FAS) y el test de Wisconsin (WCST). Se encontró que las puntuaciones arrojadas por los participantes demuestran alteraciones en las mencionadas funciones; lo cual sugiere que al intervenir tales conductas, desde una perspectiva neurocognitiva, debería contemplarse un proceso de rehabilitación integral, en el que se tengan en cuenta espedificamete dichas funciones.