La creatividad como un valor y un bien social representa una necesidadbásica para un desarrollo exitoso y sano de la humanidad en el siglo XXI. En este panorama, la educación enfrenta un reto de repensar su relación con la creatividad con el fin de crear nuevas estrategias didácticas y pedagógicas dirigidas a fomentar la capacidad creativa en los alumnos en todos los niveles desde el preescolar hasta la educación superior. En esta dirección apunta la reflexión desarrollada en este escrito dirigida a pensar la relación dialéctica entre el proceso del desarrollo de la capacidad creativa y la educación, tomando los valiosos aportes que ofrece la teoría socio-cultural.En este orden de ideas, el docente aparece como el principal actor encargado de la creación de atmósferas creativas que propician y establecen esta relación entre la educación y creatividad. La implicación y apropiación del docente de la temática de la creatividad, así como la creación de las estrategias pedagógicas y didácticas necesarias, al igual que la emergencia de la creatividad como un valor cultural al nivel de la filosofía de las instituciones educativas y de la sociedad en general, permite llevar a la realidad el ideal de un alumno creativo y reflexivo, que con el tiempo se convierte en un ciudadano comprometido con la transformación creativa de la realidad social.