Los inmigrantes mexicanos contribuyen directamente al desarrollo de Estados Unidos en condiciones de precariedad laboral y exclusión social, y paradójicamente todavía son responsabilizados de detonar el desarrollo en sus lugares de origen mediante el uso diversificado de las remesas en el consumo, la producción y la obra pública. Este artículo analiza la compleja relación entre subdesarrollo y exportación de fuerza de trabajo concatenando dos procesos clave: el desmantelamiento de la soberanía laboral y la dependencia de las remesas. Al conceder primacía explicativa a la compleja problemática del desarrollo sobre la dinámica migratoria, argumentamos que México se consolida como un reservorio laboral estadunidense, al tiempo que se profundizan la exclusión económica, el despoblamiento y la cancelación de alternativas de desarrollo.
Mexican migrants directly contribute to the development of the United States, doing so in precarious working conditions and social exclusion; as a paradox these migrants are responsible for detonating the development in their places of origin, through a diversified use of the remittances in the spheres of consumption, production and public works. This article analyses the complex relation between underdevelopment and labor force export, bringing together two key processes: the dismantling of labors sovereignty and the dependency on remittances. By granting explanatory preeminence to the complex problematic of development over the migratory dynamic, we argue that Mexico consolidates itself as a working reservoir for the United States, deepening the economic exclusion, the depopulation and putting a halt on development alternatives.