La sentencia Gauweiler del Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha supuesto un importante avance para el proceso de integración europea, pues ha confirmado la potestad del Banco Central Europeo de realizar compras masivas de deuda pública, permitiéndole actuar, en circunstancias muy determinadas, como un prestamista de última instancia de los Estados. El contenido, alcance y consecuencias de la sentencia son el objeto del presente análisis.