Se parte de la diferencia y complementariedad entre dos conceptos normativos: la libertad individual y la libertad política. A partir de los mismos, el autor tratará de mostrar las similitudes, antes que las discrepancias, sobre las tradiciones culturales asiática y occidental con la finalidad de que se alcance su comprensión mutua. No se incide, pues, en los desacuerdos tradicionalmente señalados entre ambas, especialmente en la defensa asiática del orden y el Esbado por encima del pluralismo y los derechos humanos, propios de la ilustración occidental. Se destaca, por el contrario, que también en la tradición asiática, aún siendo extremadamente rica, variada y compleja, es posible comprobar la existencia de una línea de defensa de la libertad individual, que si bien no puede confundirse con la libertad política, avanza la posibilidad de su realización.