Madrid, España
La co-autoría es muy frecuente en la mayor parte de las áreas científicas. Sin embargo, la autoría plural tiende a complicar la atribución de mérito a cada científico individual (una atribución que es la base de la evaluación científica). En este artículo, argumentamos que la colaboración no implica necesariamente co-autoría: cada autor podría publicar en artículos separados su contribución individual al proyecto colaborativo (o los artículos conjuntos podrían especificar la contribución individual de cada autor). La cuestión que nos planteamos en este artículo es por qué los científicos prefieren fusionar sus contribuciones en lugar de mantenerlas separadas – teniendo en cuenta que su objetivo es, entre otras cosas, el reconocimiento individual –. Nuestra respuesta, enmarcada en una visión inferencialista de la práctica científica, se basa en la idea de que los artículos científicos han de ser vistos como argumentos, en vez de como colecciones de conocimiento.
Co-authorship is very common in most areas of science and has grown as the complexity of research has increased the need for scientific collaboration. But plural authorship tends to complicate the attribution of merit to individual scientists, which is the basis of scientific evaluation. I argue that collaboration does not necessarily entail co-authorship, though in many cases the latter is an option that the individual scientists might not choose, at least in principle: individually authors might separately publish their own contribution to a collaborative project in which they had taken part, or papers could explicitly state what contribution each individual author had made. I ask, hence, why it is that scientists prefer to ‘pool’ their contributions instead of keeping them separate if they are pursuing, amongst other things, individual recognition. My answer, following an inferentialist approach to scientific knowledge, is based on the view of the scientific paper as a piece of argumentation rather than as a piece of knowledge.