La percepción que se tiene de la Justicia y de los jueces no coincide con el discurso oficial. La Justicia se ha convertido en escenario de resolución de la vida pública, judicializando la actividad política y social. En paralelo, se están produciendo intervenciones interesadas en su funcionamiento, pues resulta relevante para la protección de intereses particulares o políticos que deben ser controlados desde otros miradores. En este artículo se analiza el origen de sus problemas actuales y se plantea una reforma estructural de la Justicia a partir de un «frente moral común».
The perception of justice and judges does not coincide with the official discourse. Justice has become a stage for finding solutions in public life, as political and social activity has become judicialised. Alongside this, there is increasingly self-interested interventionin its operation, as it is important for the protection of individual or political interests which need to be controlled from other viewpoints. This article analyses the origin of its current problems and suggests a structural reform of justice based on a «common moral front».